Nunca estuve tan cerca de pensar que eras real. Creí que nunca llegaría a verte así, a intentar sentir tu piel en mis manos. Tan lejos pude llegar esta noche, mientras el oscuro amanecer me atrapaba, fui capaz de soñarte, con tal claridad que despejaba el cielo de las espesas nubes, como si fueras cual brillante sol en mi mañana. La melancolía de la lluvia paso desapercibida cuando llegaste. Me desperté feliz pensando en ti. Ni siquiera existes en mi vida, y tal vez ni siquiera existas; pero cambiaste mi día. Seguramente eso me convierta en una loca, pero aun así esta noche te buscare bajo mi almohada, y dejare que mi locura me lleve hasta ti.
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